En las últimas semanas, Uruguay ha sido escenario de una serie de amenazas de atentados en lugares de alta concurrencia, generando preocupación y tensión en la ciudadanía.
A finales de marzo de 2025, se registraron múltiples alertas que llevaron a la evacuación de varios establecimientos en Montevideo, incluyendo centros comerciales e instituciones educativas y sanitarias, aunque luego de varias inspecciones, no se encontraron artefactos explosivos.
Desde entonces la policía está investigando alrededor de 20 llamadas telefónicas y al menos cinco correos electrónicos con amenazas dirigidas a más de una docena de las instituciones públicas y privadas.
Dos personas han sido imputadas por simulación de delito y violencia privada, una mujer de 28 años por amenazar a un centro comercial, y un joven de 20 años por intimidar a centros educativos.
Ambos cumplen prisión domiciliaria con tobillera electrónica como medida cautelar mientras continúa la investigación.
Como respuesta, las autoridades uruguayas intensificaron las medidas de seguridad y reforzaron los protocolos de actuación ante amenazas.