El martes, un estudiante de 14 años apuñaló a una supervisora en una escuela secundaria de Francia, en un nuevo episodio de violencia escolar que ha estremecido al país.

El hecho ocurre en medio de un refuerzo de los controles de seguridad en centros educativos, tras una serie de enfrentamientos juveniles, por lo cual las autoridades han intensificado la búsqueda de armas blancas en los colegios como medida preventiva.

Francia inició operativos de control en escuelas desde marzo, luego que un joven de 17 años muriera en una pelea frente a un liceo en la región parisina y a finales de abril, una adolescente fue asesinada a puñaladas en Nantes, al oeste del país.

La última tragedia se registró en una secundaria ubicada en la localidad de Nogent, al este de Francia, durante un control de mochilas realizado por la gendarmería. En medio del operativo, el menor atacó con un arma blanca a una supervisora escolar.

La víctima, una mujer de 31 años, fue atacada en repetidas ocasiones poco antes de las 8 de la mañana y a pesar de los esfuerzos por asistirla, las heridas fueron mortales y no logró sobrevivir, según el informe de las autoridades.

La ministra de Educación, Élisabeth Borne, detalló que el adolescente, quien incluso había sido designado como delegado contra el acoso escolar, había sido suspendido temporalmente en dos ocasiones a comienzos del año por interrumpir las clases, pero no había dado problemas desde entonces.

El estudiante de 14 años fue detenido y permanece bajo custodia policial.