Estados Unidos y China acordaron reanudar las negociaciones comerciales tras una conversación telefónica entre Donald Trump y Xi Jinping. Ambos mandatarios se comprometieron a retomar el diálogo sobre aranceles y el acceso a minerales estratégicos, especialmente tierras raras, vitales para la industria tecnológica global.
Trump calificó el intercambio como “muy positivo” y confirmó que habrá una próxima ronda de reuniones entre delegaciones de alto nivel. Por parte de EE.UU., participarán el secretario del Tesoro, el secretario de Comercio y el representante comercial. China aún no ha confirmado los nombres de su equipo negociador.
El reinicio de conversaciones ocurre en medio de acusaciones mutuas sobre el incumplimiento de acuerdos firmados previamente, incluyendo restricciones impuestas a empresas tecnológicas y limitaciones a exportaciones minerales por parte de Beijing. Washington también ha limitado visados a ciudadanos chinos, lo que ha tensado aún más las relaciones.
Aunque se abordaron temas económicos, ambos líderes optaron por dejar fuera del diálogo asuntos geopolíticos como los conflictos en Ucrania o Medio Oriente. Según portavoces, el objetivo fue centrarse en estabilizar el vínculo económico bilateral, clave para la economía global.