Luego de intensas negociaciones, Estados Unidos anunció que se retira de las conversaciones entre Hamás e Israel, señalando que el brazo armado de la palestina islamista, que ha sostenido crudos enfrentamientos con el gobierno israelí desde octubre de 2023, se comporta de forma egoísta.
Israel también retiró a su equipo negociador.
«Estamos decididos a lograr todos los objetivos de la guerra. Y estamos trabajando para alcanzar otro acuerdo para la liberación de nuestros rehenes. Pero si Hamás interpreta nuestra disposición a llegar a un acuerdo como una debilidad, como una oportunidad para imponer condiciones de rendición que pondrían en peligro al Estado de Israel, está gravemente equivocado. Estamos decididos a traer a todos de vuelta, y eso es lo que haremos», dijo el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Desde hace más de dos semanas, los negociadores de ambos bandos mantuvieron conversaciones indirectas en Catar, en un intento de acordar una tregua que permita en un primer momento liberar a diez rehenes israelíes vivos, a cambio de un número indeterminado de palestinos presos en Israel.
El emisario estadounidense Steve Witkoff anunció el retorno de sus negociadores presentes en Catar, «para consultas tras la última respuesta de Hamás, que demuestra claramente su falta de voluntad de alcanzar un alto el fuego en Gaza».
Mientras tanto, Israel enfrenta una creciente presión de organizaciones humanitarias que denuncian el «hambre masiva» que se extiende por la Franja de Gaza y que ha acabado con la vida de al menos mil personas.