El presidente Donald Trump desestimó las preocupaciones sobre la filtración de información sensible en un chat de Signal, donde altos funcionarios discutieron planes militares sobre un ataque en Yemen. A pesar de que un periodista fue agregado accidentalmente al grupo, Trump afirmó que el incidente “no fue grave” y que su equipo “ha aprendido la lección”.


El asesor de seguridad nacional, Mike Waltz, asumió la responsabilidad por e l error, asegurando que se trató de un accidente sin consecuencias de seguridad. Sin embargo, el uso de una aplicación de mensajería cifrada para discutir estrategias militares ha provocado fuertes críticas por parte de legisladores demócratas, quienes advierten sobre la falta de protocolos adecuados para manejar información confidencial.

   

 

 

 

 

 

 

The Atlantic reveló que los mensajes compartidos incluían detalles sobre paquetes de armas y objetivos estratégicos. Aunque el gobierno insiste en que no se trató de información clasificada, senadores como Jon Ossoff han calificado el incidente como una “vergüenza” y un reflejo de la imprudencia en la administración de datos sensibles.


Tulsi Gabbard, directora de Inteligencia Nacional, y John Ratcliffe, director de la CIA, testificaron ante el Senado sin aclarar por qué se usó Signal para discutir estos asuntos. Mientras algunos funcionarios sugieren que el error no tuvo impacto en la seguridad nacional, los críticos advierten que de haber sido interceptado, el contenido de los mensajes podría haber puesto en riesgo vidas estadounidenses.

A pesar de la controversia, Trump defendió a su equipo y reiteró que los ataques demócratas buscan distraer la atención de los éxitos de su gobierno en seguridad nacional. La Casa Blanca, por su parte, ha evitado confirmar si se tomarán medidas para evitar que situaciones similares ocurran en el futuro.