Por primera vez desde el inicio de la invasión rusa en 2022, el edificio del Gabinete de Ministros de Ucrania en Kiev resultó dañado tras un ataque con misiles.
Puertas y ventanas quedaron destrozadas, mientras los bomberos combatían el incendio incluso con apoyo aéreo. “El techo y los pisos superiores del edificio fueron dañados debido a un ataque enemigo”, confirmó la primera ministra Yulia Svyrydenko, quien señaló que las labores de extinción continuaban en la mañana de este domingo.
La nueva oleada de bombardeos alcanzó además otras ciudades como Krivói Rog, Odesa, Kremenchuk y Zaporiyia, dejando decenas de heridos. En Kiev, al menos dos personas murieron, una madre de 32 años y su bebé, cuando un proyectil impactó el edificio residencial donde vivían, según informó el alcalde de la localidad.
El ministro de Asuntos Exteriores, Andrii Sybiha, calificó el ataque como “una seria escalada” y añadió: “El mayor cinismo es que estos brutales ataques ocurren justo cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump hace todo lo posible por lograr la paz”.
De acuerdo con la Fuerza Aérea de Ucrania, Rusia lanzó un número récord de 805 misiles y drones durante la ofensiva nocturna, de los cuales varios impactaron en distintos puntos del país.
Ante la magnitud de los ataques, las autoridades ucranianas solicitaron sanciones más duras contra Moscú y el refuerzo del suministro de armas a Ucrania.
El edificio del Gabinete de Ministros, una construcción de diez plantas levantada entre 1936 y 1938 durante la era soviética, es considerado uno de los símbolos administrativos más importantes de Ucrania. Allí funcionan las oficinas de los principales responsables del gobierno.
La edificación se encuentra en pleno distrito gubernamental de Kiev, a escasos metros de la Rada Suprema, el Parlamento ucraniano y del Palacio Mariyinsky, sede de la Presidencia.