Un motor de misil fue hallado entre los escombros del edificio parcialmente destruido en Kiev, Ucrania, confirmando que el ataque fue ejecutado con armamento guiado de alta potencia. El impacto ocurrió entre los pisos quinto y sexto de un complejo residencial, provocando el colapso total de la estructura y dejando más de 30 muertos, entre ellos varios menores. Se trata del atentado más letal registrado en la capital ucraniana en lo que va del año.
Las autoridades indicaron que el ataque combinó drones y misiles, golpeando distintos puntos de Kiev, incluidos edificios residenciales, hospitales y centros educativos. En algunos barrios los daños estructurales fueron severos. Testigos relataron que varias personas fueron expulsadas de sus viviendas por la onda expansiva, mientras que otras quedaron atrapadas bajo los escombros.
Este viernes se declaró día de luto en la ciudad. Más de 150 personas resultaron heridas y continúan recibiendo atención médica. El presidente Volodímir Zelensky calificó el ataque como una “muestra brutal de terrorismo”, mientras que Alemania anunció el envío urgente de sistemas Patriot para reforzar la defensa aérea ucraniana.