Un fuerte incendio forestal obligó a evacuar a un grupo de residentes y al menos 500 turistas del icónico Parque Nacional del Gran Cañón, al suroeste de Estados Unidos. Las autoridades informaron que las llamas se expandían con rapidez, representando un riesgo inminente en la zona Norte.
El Servicio de Parques Nacionales emitió una orden de evacuación inmediata para todos los residentes del Borde Norte, debido al avance del incendio conocido como Dragon Bravo.
El fuego, de gran intensidad, destruyó el histórico Grand Canyon Lodge, el único alojamiento dentro del parque en ese sector, así como decenas de edificaciones más, obligando a cerrar la zona por el resto de la temporada.
Los encargados del lugar informaron que además del albergue, se perdieron el centro de visitantes, una planta de tratamiento de aguas residuales, una gasolinera, oficinas administrativas y viviendas del personal. Se estima que entre 50 y 80 estructuras fueron consumidas por las llamas, incluyendo numerosas cabañas históricas.
Actualmente, dos incendios forestales están activos en el área del Borde Norte: el White Sage y el Bravo Dragon, siendo este último el más destructivo. Fue precisamente el Dragon Bravo el que arrasó con las construcciones y forzó las evacuaciones.