Moscú y París volvieron a comunicarse al más alto nivel este viernes, cuando los presidentes Vladímir Putin y Emmanuel Macron sostuvieron su primera conversación telefónica desde septiembre de 2022. El Kremlin informó que el diálogo giró en torno al conflicto en Ucrania y las crecientes tensiones en Oriente Medio, particularmente tras los recientes ataques israelíes y estadounidenses en Irán.

Durante la llamada, Putin responsabilizó a los países occidentales de haber ignorado durante años las preocupaciones de seguridad de Moscú, y calificó la guerra en Ucrania como una consecuencia directa de esa actitud. Además, reiteró que una solución pacífica solo será posible si se abordan las causas profundas del conflicto y se reconoce la nueva realidad sobre el terreno, en referencia a las zonas ocupadas por fuerzas rusas.

Ambos mandatarios también discutieron extensamente sobre Oriente Medio y reafirmaron la responsabilidad compartida de sus países en la estabilidad global, especialmente en el marco del régimen de no proliferación nuclear. En ese contexto, subrayaron el derecho de Irán a desarrollar energía nuclear con fines pacíficos, siempre bajo supervisión del Organismo Internacional de Energía Atómica.

 

Putin y Macron coincidieron en que los desafíos nucleares y de seguridad regional deben abordarse únicamente mediante la vía diplomática y política. El Kremlin destacó que Moscú sigue abierto al diálogo con los países europeos, a pesar de que, según Putin, fueron estos los que suspendieron los contactos bilaterales tras el inicio de la guerra en Ucrania.