El sur de China se encuentra bajo una severa emergencia climática luego de que el tifón Wipha, degradado a tormenta tropical, dejara a su paso intensas lluvias que provocaron graves inundaciones, deslizamientos de tierra y bloqueos en la infraestructura vial de varias ciudades. En la provincia de Fujian, casi 300 milímetros de lluvia cayeron en solo 12 horas, saturando el terreno y bloqueando un túnel clave en el centro de Fuzhou.

El fenómeno meteorológico tocó tierra en la región costera de Cantón con vientos de hasta 167 km/h, obligando a evacuar a casi 700 mil personas y suspendiendo clases, vuelos y transporte terrestre en varias ciudades. Pese a su debilitamiento, Wipha ha causado estragos con lluvias extremas que continúan afectando zonas densamente pobladas.

Las autoridades meteorológicas advierten que los efectos de la tormenta se extenderán a lo largo de esta semana, con fuertes precipitaciones esperadas en varias provincias del sur de China y alerta máxima por posibles deslizamientos de tierra. En Fuzhou, la entrada de un túnel colapsó tras un alud, dejando incomunicada parte del centro urbano y complicando las labores de rescate.

Fuera de China, Vietnam y Tailandia también han emitido alertas de emergencia. En Quang Ninh, Vietnam, se esperan inundaciones, caída de árboles y tormentas eléctricas, mientras que en el norte tailandés ya se han activado centros de evacuación en previsión de crecidas repentinas de ríos.

El gobierno chino ha desplegado equipos de emergencia y continúa monitoreando el avance del sistema meteorológico, que podría seguir afectando a la región en los próximos días