El sarampión ha cobrado su primera víctima en Estados Unidos. Se trata de un niño de Texas el que se ha convertido en el primer fallecido de este brote, que ya afecta a más de un centenar de personas en ese estado.

Un niño en edad escolar falleció en Texas, Estados Unidos tras haber sido diagnosticado con sarampión, informaron las autoridades de salud estatales. El menor, que no estaba vacunado, es la primera víctima mortal de un brote que ya suma 124 casos en dicho estado, principalmente en comunidades con bajas tasas de inmunización.

El Departamento de Servicios de Salud de Texas calificó este brote como el más grave en 30 años y advirtió sobre el alto riesgo de contagio en personas no vacunadas. Hasta el momento, 18 pacientes han requerido hospitalización. La enfermedad también ha cruzado fronteras estatales, con nueve casos adicionales reportados en Nuevo México.

El resurgimiento del sarampión coincide con el inicio de la gestión de Robert F. Kennedy Jr. como Secretario de Salud en el gobierno de Donald Trump. Kennedy, un reconocido escéptico de las vacunas, declaró que su departamento está «vigilando» la situación tras confirmarse una segunda muerte.

Expertos en salud han señalado que la vacuna contra el sarampión, introducida en 1963, logró reducir drásticamente las muertes por esta enfermedad. Sin embargo, con el aumento del movimiento antivacunas, brotes como este se han vuelto más frecuentes.

Los especialistas médicos señalan que el sarampión sigue causando más de 100 mil muertes al año en el mundo, especialmente en poblaciones sin acceso a la vacuna, resaltando la importancia de la inmunización para prevenir más casos mortales