El Departamento de Estado de EE. UU. emitió una alerta de seguridad urgente instando a los ciudadanos estadounidenses en Oriente Medio y el Norte de África a extremar la precaución debido al aumento de las tensiones en la región.

La alerta se relaciona con el riesgo de escalada del conflicto entre Israel e Irán. Ante estos acontecimientos, EE. UU. y sus aliados, incluido el Reino Unido, están tomando medidas para proteger a sus ciudadanos y personal, incluyendo la evacuación parcial de diplomáticos y familias de militares de varios países.

De hecho, el Departamento de Estado y el Pentágono han iniciado la retirada del personal no esencial de las embajadas en Irak, Baréin, Kuwait y el consulado en Erbil (Kurdistán iraquí), debido al aumento de las amenazas a la seguridad.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al comentar la situación, señaló que Oriente Medio «puede ser un lugar peligroso» y confirmó que la evacuación se lleva a cabo como medida preventiva. Al mismo tiempo, la embajada estadounidense en Israel emitió una alerta que restringe la circulación del personal y sus familias fuera de Tel Aviv, Jerusalén y Beersheba, instando a todos los ciudadanos estadounidenses en el país a reforzar las medidas de seguridad personal.

La advertencia surge a medida que aumentan las tensiones con Irán, que, según The Wall Street Journal, está preparando un plan para responder con cientos de misiles balísticos en caso de un ataque israelí.

El ministro de Defensa iraní, el general de brigada Aziz Nasirzadeh, afirmó que las bases estadounidenses en la región serían blanco de ataques si las negociaciones nucleares con Estados Unidos fracasan y estalla el conflicto. Enfatizó que Teherán no busca armas nucleares, pero está dispuesto a infligir «pérdidas significativas» a sus adversarios. Las amenazas han aumentado los temores de una escalada, especialmente después de que CBS News informara que Israel podría estar preparándose para una acción militar contra Irán.