Un aluvión de lodo y escombros arrasó el pueblo de Dharali, en el estado de Uttarakhand, al norte de India, dejando al menos cuatro muertos y cerca de 100 desaparecidos, incluidos 11 soldados. Las intensas lluvias provocaron el desborde de ríos y sepultaron viviendas en esta zona turística del Himalaya.
El Ejército indio desplegó columnas adicionales, perros rastreadores, drones y maquinaria pesada para acelerar las labores de rescate, mientras helicópteros transportan suministros a las zonas aisladas. Las imágenes difundidas por medios locales muestran cómo el torrente de lodo arrasó viviendas y edificios en segundos.
El primer ministro Narendra Modi expresó sus condolencias a través de la red social X y aseguró que “se está haciendo todo lo posible” para ayudar a los afectados. Prashant Arya, el principal funcionario de Uttarkashi, explicó que la comunicación ha sido difícil por la mala conectividad, pero que se han enviado equipos a la zona, donde hay numerosos hoteles y restaurantes.
La región continúa bajo alerta por lluvias extremas. Los meteorólogos advirtieron que el nivel de los ríos en la zona supera el umbral de peligro.