El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y la congresista Alexandria Ocasio-Cortez protagonizaron un nuevo intercambio de críticas en público mediante plataformas de redes sociales.
La representante solicitó en la plataforma “X” que el mandatario fuera destituido de su cargo tras los recientes ataques contra Irán.
“La desastrosa decisión del presidente de bombardear Irán sin autorización es una grave violación de la Constitución y de los poderes de guerra del Congreso” afirmó Alexandria, añadiendo que “Se ha arriesgado impulsivamente a lanzar una guerra que podría atraparnos durante generaciones.”
Según la funcionaria el proceder “constituye, absoluta y claramente, motivo de un juicio político”.
Poco después Donald Trump respondió en su red Truth Social: “La estúpida Alexandria Ocasio-Cortez, una de las personas más «tontas» del Congreso, ahora pide mi destitución, a pesar de que los corruptos demócratas ya lo han hecho dos veces. El motivo de sus «desahogos» son todas las victorias que Estados Unidos ha conseguido bajo la administración Trump. Los demócratas no están acostumbrados a GANAR, y ella no soporta la idea de que nuestro país vuelva a tener éxito. Cuando examinemos sus resultados en los exámenes, descubriremos que NO está cualificada para el cargo”, aseveró el presidente.
La congresista volvió a responder al mandatario con otra publicación: “Señor Presidente, no descargue su enojo conmigo. Sólo soy una chica tonta. Desquitate con quien te convenció de traicionar al pueblo estadounidense y a nuestra Constitución bombardeando ilegalmente a Irán y arrastrándonos a la guerra. Sólo te tomó 5 meses romper casi todas las promesas que hiciste”.
El debate se centra en cuestiones constitucionales sobre los poderes de guerra.
Los demócratas argumentan que la administración no ha presentado evidencia de una «amenaza inminente» que justifique la acción militar sin aprobación legislativa.
Por su parte, los republicanos defienden las acciones del presidente.
Algunos demócratas están promoviendo votaciones en el Congreso para limitar futuros ataques contra Irán sin autorización legislativa, aunque estos esfuerzos podrían verse afectados por el reciente alto el fuego entre Irán e Israel.