El Ministerio de Salud de Colombia urgió a la población a vacunarse contra la fiebre amarilla tras confirmarse 70 casos y 33 fallecimientos hasta el 8 de abril. El brote afecta especialmente a Tolima, donde no se reportaban casos desde hace más de 25 años, y se ha extendido a Caldas, Putumayo, Caquetá y Meta.

Ante esta situación, 388 municipios fueron declarados en alto riesgo y se decretó calamidad pública en Tolima. El cambio climático podría estar favoreciendo la propagación del virus en zonas montañosas previamente no afectadas.

El gobierno ha aplicado más de 54 mil dosis en municipios priorizados y zonas cercadas por el brote. La vacuna es gratuita y se recomienda especialmente para quienes habitan o viajan a zonas de riesgo.

Las autoridades también evalúan volver a exigir el carné de vacunación para viajeros nacionales e internacionales con destino a regiones afectadas.