En un esfuerzo por impulsar el crecimiento poblacional, las autoridades locales chinas están implementando medidas económicas para promover el crecimiento demográfico, que incluye, incluso, bonos por matrimonio y por la procreación de hijos.

En la ciudad de Luliang, ubicada en el norte de China, el matrimonio se ha convertido en una decisión económicamente atractiva. Las autoridades locales ofrecen incentivos en efectivo a las parejas que deciden unir sus vidas, como parte de un plan gubernamental para fomentar el crecimiento de la población.

La recompensa económica por contraer matrimonio es de 1.500 yuanes, lo que equivale a unos 200 dólares. Esta suma representa un apoyo significativo, especialmente considerando que supera el salario promedio mensual de muchos habitantes de la zona.

«Cuando pensamos en obtener nuestros certificados de matrimonio, esta política todavía no existía. Cuando nos enteramos, pensamos que era realmente buena, así que decidimos esperar. Como la política empezó a aplicarse el 1 de enero de 2025, planeamos venir a obtener los certificados después del Festival de Primavera» Zhang Gang, recién Casado

Además del incentivo inicial, las parejas casadas pueden acceder a beneficios adicionales al registrar a sus hijos. Estos incluyen subsidios y contribuciones al seguro médico, así como pagos en efectivo por cada hijo nacido.

«No planeábamos casarnos pronto, pero en noviembre vimos esta política. Así que le dije a mi esposa, hagámoslo ahora mismo» Li Yingxing, recién Casado

A pesar de estos atractivos incentivos, el número de matrimonios en China ha experimentado un descenso en los últimos años. Expertos sugieren que factores como la presión social y las expectativas económicas podrían estar influyendo en las decisiones de las nuevas generaciones.

«El número de hombres con un nivel educativo alto y buen trabajo es muy bajo. Tengo aproximadamente 300 mujeres con títulos de maestría en mi lista, pero solo alrededor de una docena de hombres con maestría» Feng Yuping, casamentera

El tiempo dirá si estas medidas innovadoras logran revertir esta tendencia y motivar a más parejas a embarcarse en la aventura del matrimonio. Mientras tanto, esta iniciativa gubernamental nos invita a reflexionar sobre cómo las políticas públicas pueden moldear las decisiones personales y el futuro de una sociedad.