El avión que trasladaba a Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, enfrentó problemas de navegación al aproximarse a Bulgaria, luego de que su sistema GPS resultara interferido. Pese a la falla, la tripulación consiguió completar el aterrizaje recurriendo a métodos tradicionales de guía terrestre.
La Comisión Europea señaló que las autoridades locales consideran que el incidente podría estar vinculado a una acción de Rusia, aunque todavía no se ha confirmado si se trató de un ataque intencional contra el vuelo chárter.
«Por supuesto, somos conscientes y estamos acostumbrados de alguna manera a las amenazas e intimidaciones que son un componente habitual del comportamiento hostil de Rusia. Por supuesto, esto no hará sino reforzar aún más nuestro inquebrantable compromiso de aumentar las capacidades de defensa y el apoyo a Ucrania» aseguró, Arianna Podestà, portavoz de la Comisión Europea.
Von der Leyen, de 66 años, viajó a Bulgaria como parte de una gira por siete países de la Unión Europea fronterizos o situados cerca de Bielorrusia y Rusia, para transmitirles la «plena solidaridad» del bloque. La Comisión Europea señaló que la región ha experimentado «muchas de estas actividades de interferencia y suplantación» y agregó que ha sancionado a varias empresas que se creen que están involucradas.