¿Auto deportarse o esperar a ser deportado por las autoridades? Ese es el dilema que enfrentan miles de inmigrantes en EE. UU., bajo la nueva estrategia migratoria del gobierno.

Datos recientes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, ICE, muestran un aumento constante en el número de personas que eligen abandonar el país voluntariamente, impulsadas por políticas que favorecen la salida por cuenta propia frente a una expulsión forzada.

Como parte de su nueva estrategia migratoria, ICE, ha lanzado una campaña en redes sociales que promueve la salida voluntaria del país. A través de publicaciones dirigidas a inmigrantes sin estatus legal, la agencia ofrece un incentivo económico de $1,000 dólares a quienes decidan autodeportarse utilizando exclusivamente la aplicación CBP Home.

La aplicación CBP One, que anteriormente servía para agendar citas en los cruces fronterizos, fue reemplazada por CBP Home App, la cual ahora permite a los migrantes reportar voluntariamente su salida del país.

La información, obtenida tras una solicitud amparada en la Ley de Libertad de Información, FOIA, abarca hasta el 31 de julio de 2025 y revela que desde el 20 de enero ICE ha deportado a 145,419 inmigrantes sin estatus legal.

El punto más alto de deportaciones se dio en junio, con 27,970 casos registrados. Esta tendencia responde a un endurecimiento en la aplicación de la ley migratoria y al desarrollo de opciones que facilitan la autodeportación como alternativa a ser detenido y removido.

De acuerdo con un análisis realizado por Newsweek, en febrero de 2025, el primer mes completo bajo la nueva administración, se registraron 592 salidas voluntarias. Para julio, esa cifra se elevó a 4,241, consolidando una tendencia ascendente en este tipo de procesos.

No obstante, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, CBP, aún no ha publicado cifras oficiales sobre el uso de esta herramienta, al menos hasta inicios de septiembre de 2025.

La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, ha subrayado en varias ocasiones el incremento de deportaciones durante su gestión. Sin embargo, tanto el Departamento de Seguridad Nacional, DHS como ICE han ofrecido informes de forma irregular, lo que dificulta una evaluación precisa del impacto total.

Así, la autodeportación se presenta como una alternativa cada vez más común frente a las estrictas medidas de control migratorio.