Austria ha advertido a su población sobre un posible apagón eléctrico de gran escala que podría afectar al país antes de que finalice el año. Así lo confirmó la ministra de Defensa, Klaudia Tanner, quien calificó la probabilidad de este evento como “muy alta” y aseguró que “no es cuestión de si ocurrirá, sino de cuándo”.

La advertencia se da en un contexto de creciente preocupación energética en Europa, especialmente tras el reciente apagón masivo registrado en España. Las autoridades austriacas han comenzado a implementar una serie de medidas preventivas, incluyendo la autosuficiencia energética de todas las instalaciones militares del país, con el objetivo de garantizar su operatividad en caso de una interrupción generalizada del suministro eléctrico.

El gobierno ha difundido una lista de recomendaciones para la ciudadanía, que incluyen desde linternas, radios a pilas y reservas de alimentos no perecederos, hasta botiquines de primeros auxilios y combustible alternativo. El plan contempla provisiones suficientes para al menos dos semanas de autonomía en cada hogar.

Aunque un apagón eléctrico de escala mundial se considera improbable, expertos alertan sobre su posibilidad en escenarios extremos, como desastres naturales o ciberataques. Precisamente, en el caso español, el Instituto Nacional de Ciberseguridad y la Comisión Europea investigan un posible ataque informático como causa principal del reciente corte de energía.

La advertencia de Austria ha generado inquietud en el seno de la Unión Europea, donde varios países estudian reforzar sus infraestructuras críticas ante un panorama energético cada vez más inestable.