En la remota aldea de Chasoti, en el distrito de Kishtwar, India, un desplome de lluvia intensa (conocido como cloudburst) desató inundaciones súbitas y arrasó una cocina comunitaria y un puesto de seguridad, atrapando a numerosos peregrinos. Al menos 46 personas han fallecido y más de 200 están desaparecidas, según las autoridades locales.
Las operaciones de socorro se han activado de inmediato: participan la policía local, la NDRF, el ejército y la fuerza aérea, a pesar de la dificultad para acceder al área. Algunas imágenes transmitidas por televisión muestran escenas estremecedoras de peregrinos atrapados entre aguas crecientes.
El cloudburst -o chubasco en español- es una tormenta repentina que descarga más de 100 mm de lluvia en minutos; y en zonas montañosas como el Himalaya, puede desatar inundaciones catastróficas y deslaves. Las autoridades habían emitido advertencias por lluvias intensas y deslaves en días previos.