Las fuerzas del orden de Austria, Bélgica y España, con el respaldo de Europol, desmantelaron el 14 de enero una sofisticada red bancaria clandestina que facilitaba operaciones financieras ilícitas a organizaciones criminales en Europa. Durante la operación, que incluyó 13 allanamientos, se arrestó a 17 personas, en su mayoría de nacionalidad china y siria, y se incautaron activos por más de 4,5 millones de euros, incluidos 10 propiedades inmobiliarias, 18 vehículos, criptomonedas y 4 escopetas.

Las autoridades identificaron que esta red ofrecía servicios financieros paralelos, incluyendo la banca ilegal Hawala, el intercambio de criptomonedas por efectivo y mensajería de dinero, permitiendo a otros grupos criminales mover grandes sumas sin ser detectados. Las investigaciones señalan que esta estructura criminal podría haber manejado al menos 21 millones de euros para redes dedicadas al tráfico de migrantes y drogas.

Europol jugó un papel clave en la operación, desplegando expertos en el terreno en los tres países y financiando el traslado de investigadores españoles para coordinar las acciones en Austria y Bélgica. Los datos incautados de teléfonos de traficantes durante operaciones previas permitieron descubrir esta red financiera paralela, que operaba a través de múltiples sucursales para atender a diferentes mercados criminales.

La desarticulación de esta red representa un importante golpe contra las infraestructuras financieras del crimen organizado en Europa, pero las autoridades advierten que estas redes son altamente resilientes y podrían volver a surgir si no se toman medidas adicionales para fortalecer el control financiero.