El anestesista acusado de asesinar a 12 personas compareció en un tribunal de Francia.
El hombre acusado de envenenar intencionalmente a 30 personas, trabajaba en dos clínicas de Besanzón, al este del país.

La docena de víctimas fatales de edades que rondaban los 4 y 89 años sufrieron paros cardíacos.

Los investigadores sospechan que Frédéric Péchier manipuló bolsas de anestesia de sus colegas para crear emergencias en el quirófano, en las que pudiera intervenir y presumir de sus supuestos talentos de reanimación.

El acusado asegura que nunca envenenó a nadie y sostiene que la mayoría de los envenenamientos fueron el resultado de «errores médicos» de sus compañeros.

El anestesiólogo no practica la medicina desde 2017, aunque en 2023 fue autorizado a trabajar si no entra en contacto con pacientes.

Los crímenes fueron cometidos entre 2008 y 2017, cuando iniciaron las investigaciones, después de que una mujer de 36 años sufriera un paro cardíaco durante una operación y las sospechas recayeran rápidamente sobre el acusado.

De los 70 informes médicos examinados, llegaron a juicio los casos de 30 pacientes que sufrieron paros cardíacos durante operaciones.

Ahora el profesional enfrenta cadena perpetua, aunque comparece libre con medidas de control judicial.

El veredicto se espera el 19 de diciembre, al término del juicio.