Un hombre abrió fuego la mañana del lunes en el área de valet del Grand Sierra Resort, el mayor casino de Reno, Nevada. Las autoridades confirmaron al menos dos personas muertas y tres heridas, dos de ellas en estado crítico. El atacante fue abatido por agentes de policía tras un intercambio de disparos y permanece hospitalizado bajo custodia.

Según testigos, el tirador comenzó el ataque tras un breve fallo en su arma, disparando a personas en el estacionamiento y alcanzando también a una conductora que transitaba por la zona. Aunque el casino fue parcialmente cerrado, continuó operando desde accesos alternos mientras se desarrollaba el operativo de seguridad.

Funcionarios locales, incluyendo la alcaldesa Hillary Schieve, elogiaron la rápida acción de la policía, que evitó una tragedia mayor. La investigación quedó en manos del Departamento de Policía de Sparks, con el apoyo de otras agencias estatales y locales, mientras se intenta establecer el móvil del ataque.