Unos 44 menores y 8 adultos de origen francés, en su mayoría adolescentes judíos de una colonia, fueron desalojados del vuelo V8166 de Vueling en Valencia, España rumbo a París, Francia por supuestamente interrumpir la demostración de seguridad y manipular equipo de emergencia; tras el desembarque, la Guardia Civil esposó a una monitora.

El ministro israelí de la Diáspora, Amichai Chikli, calificó el incidente como “antisemita”, afirmando que los chicos solo cantaban en hebreo y fueron acusados injustamente. Vueling negó la discriminación religiosa y defendió que actuaron únicamente por motivos de seguridad, respaldada por la Guardia Civil. La Federación de Comunidades Judías de España solicitó pruebas

La aerolínea ha negado que el desalojo se haya debido a la acusación de que Israel es un «estado terrorista», lo que Chikli ha expuesto como razón del desembarco.