La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, se interpuso este lunes en un operativo federal en el parque MacArthur, logrando que los agentes de inmigración y tropas de la Guardia Nacional se retiraran sin detener a ningún inmigrante, según testigos y funcionarios locales.

Equipados con armamento y equipo táctico, el despliegue incluyó a más de 90 miembros de la Guardia Nacional y al menos 17 vehículos militares, quienes recorrieron el parque durante una hora ante la mirada de vecinos y activistas que habían advertido previamente a los migrantes que abandonaran la zona.

Bass, quien llegó al parque a media mañana, observó los movimientos del operativo y sostuvo conversaciones con mandos federales. Poco después, las tropas y los agentes regresaron a sus vehículos y abandonaron el lugar sin realizar arrestos. “Sin duda creo que esto es una forma de intimidación”, declaró la alcaldesa más tarde, en alusión a las políticas del presidente Donald Trump.

El parque MacArthur, conocido como la “Isla Ellis de la Costa Oeste”, es un espacio emblemático para las familias inmigrantes de Los Ángeles. El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas no confirmó si planea nuevas acciones en la zona, mientras la alcaldesa adelantó que pedirá explicaciones formales al Gobierno federal sobre el objetivo y alcance de la operación.