El presidente Gustavo Petro rechazó de forma contundente el asesinato de ocho líderes sociales y religiosos cuyos cuerpos fueron hallados en una fosa común en zona rural de Calamar, Guaviare. Según explicó el mandatario, las víctimas habrían sido secuestradas y asesinadas en medio de disputas territoriales entre grupos armados ilegales.

Las personas identificadas son Jesús y Carlos Valero, Maribel Silva, Isaid Gómez, Maryuri y Óscar Hernández, James Caicedo y Nixon Peñaloza. Todas ellas, según indicó el jefe de Estado, ejercían liderazgo comunitario y espiritual en una región golpeada por la violencia.

Imagen

“Estos hechos son una grave afrenta al derecho a la vida, a la libertad religiosa y al trabajo comunitario que muchas personas desarrollan en territorios históricamente abandonados”, expresó Petro mediante la red social X, quien además envió un mensaje de solidaridad a los familiares de las víctimas y sus comunidades.

El presidente hizo un llamado a las instituciones del Estado a redoblar esfuerzos para proteger a quienes lideran procesos desde la fe y desde la construcción de paz. “Es deber del Estado garantizar su seguridad y asegurar que estos crímenes no se repitan ni queden impunes”, afirmó.

En su mensaje final, Petro reafirmó su compromiso con la vida digna, la libertad de cultos y la paz como camino colectivo. “Que el ejemplo de estas personas nos impulse a seguir construyendo un país justo, en el que creer, vivir y liderar en paz sea un derecho para todos”, concluyó.

Trino de Petro por hallazgo