Tras días consecutivos de enfrentamiento, Irán lanzó una advertencia directa a Estados Unidos, amenazando con atacar sus bases militares en la región después de los bombardeos realizados por Washington contra instalaciones nucleares iraníes.
El portavoz de las fuerzas armadas iraníes, Ebrahim Zolfaghari, advirtió que las acciones hostiles de EE. UU. ampliarán los objetivos legítimos de Irán y podrían extender la guerra por toda la región.
El 20 de junio, Estados Unidos bombardeó los complejos nucleares de Isfahán, Natanz y Fordo, operación que el Pentágono calificó como un golpe devastador al programa nuclear iraní. Sin embargo, el director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, pidió acceso a las instalaciones para verificar la magnitud de los daños y la situación del uranio enriquecido almacenado.
Israel continuó este lunes con ataques contra Teherán, incluyendo instalaciones importantes y clave para la soberanía iraní, además de un ataque directo contra el cuartel general de la Guardia Revolucionaria. Desde el inicio del conflicto el 13 de junio, las operaciones militares israelíes han provocado más de 400 muertos y más de 3.000 heridos en Irán, la mayoría civiles.
El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abás Araqchi, aseguró que EE. UU. e Israel “cruzaron una línea roja” y anunció contactos diplomáticos con Rusia, que condenó las acciones militares.
