Francia ha elevado el tono de alerta respecto al programa nuclear de Irán, calificando de «amenaza real» la posibilidad de que Teherán desarrolle armamento nuclear, no solo para Oriente Medio sino también para la seguridad de Europa. Así lo ha expresado el presidente Emmanuel Macron.
Desde el pasado mes de junio, el presidente Macron ha liderado activamente los esfuerzos diplomáticos junto a Reino Unido y Alemania.
La postura de Francia se mantiene clara, la única solución pasa por un acuerdo integral que imponga límites estrictos al enriquecimiento de uranio y contenga la capacidad de misiles balísticos de Irán, siempre bajo una supervisión internacional rigurosa.
Estas declaraciones se dieron mientras los ministros del llamado grupo E3 (Francia, Alemania y Reino Unido), junto con la jefa de la diplomacia europea Kaja Kallas, instaron a Irán a moderar su programa y reiniciar un diálogo serio además de una reducción firme del enriquecimiento de uranio y en una supervisión estricta.
Francia, única potencia nuclear de la UE, apoya un nuevo acuerdo que limite el programa atómico iraní pero que no lo descarte por completo, siempre bajo control internacional.
Se anticipa que en las próximas semanas, en paralelo a estas conversaciones, seguirán presionando a Washington y Teherán para evitar enfrentamientos abiertos.