“Dos países ya fueron aprobados: Uzbekistán y Colombia”, anunció Dilma Rousseff, presidenta del Nuevo Banco de Desarrollo (NDB), al oficializar la adhesión de Colombia al banco del bloque BRICS, durante el Foro Económico Internacional de San Petersburgo.
La entrada de Colombia fue gestionada por el presidente Gustavo Petro durante su visita a Shanghái en mayo, donde presentó formalmente la solicitud de ingreso. Según la canciller Laura Sarabia, el país busca fortalecer la cooperación con economías emergentes y diversificar fuentes de financiamiento para el desarrollo.
Colombia aportará US $512,5 millones al capital autorizado del NDB, de los cuales US $102,5 millones serán pagados y el resto se mantendrá como capital exigible. El desembolso inicial deberá concretarse en los próximos seis meses, según lo estipulado por el organismo financiero.
Petro afirmó que Colombia busca mantener una postura neutral, al tiempo que avanza en el acceso a nuevas fuentes de financiamiento para proyectos de infraestructura, energías renovables y desarrollo estratégico
