Crece el rechazo al turismo masivo en España . Miles de ciudadanos se movilizaron en ciudades clave como Barcelona, Palma, San Sebastián y Granada para denunciar que el modelo turístico está expulsando a los residentes y encareciendo la vivienda

 «Estoy aquí por la dignidad de un pueblo. Porque ya no escuchamos pájaros, solo aviones. Mires donde mires, hay turistas. Ya no cabemos — ni los coches, ni las casas. Hemos perdido nuestra dignidad. Hemos prostituido Mallorca. La hemos vendido. Basta.» lamentó Tony Rigo, manifestante en Palma de Mallorca 

En Barcelona, ​​los manifestantes dispararon pistolas de agua a los turistas y colocaron pegatinas y cintas de recinto en los albergues turísticos. 

 «Se está transformando incluso lo que es el comercio de barrio. Cuando tú quieres ir a comprar, los comercios cierran porque son sustituidos por comercios destinados exclusivamente a un público turista. Con lo cual eso deja de ser una ciudad para vivir y pasa a ser una ciudad parque temático.»  aseguró José Luís Muñoz, manifestante en Barcelona 

España, segundo destino turístico mundial por detrás de Francia, recibió 17,1 millones de visitantes internacionales en el primer trimestre del año, un nuevo récord para el país.