Un incidente diplomático se desató la madrugada de este sábado en Maturín, Venezuela, luego de que las autoridades locales impidieran el regreso de la selección boliviana de fútbol tras su partido por las eliminatorias sudamericanas. El equipo tenía previsto viajar en un vuelo chárter hacia Santa Cruz, pero fue obligado a volver a su hotel sin una explicación oficial clara.

La situación ocurrió luego de la derrota 2-0 de Bolivia frente a Venezuela. A pesar de que toda la delegación ya se encontraba a bordo del avión, personal en el aeropuerto negó la autorización para el despegue. Directivos de la Federación Boliviana de Fútbol denunciaron el hecho como un acto de “sabotaje” que afecta directamente la preparación del equipo de cara a su próximo encuentro contra Chile.

Los futbolistas fueron escoltados nuevamente hasta su alojamiento alrededor de las 3:30 de la mañana, lo que generó malestar en la delegación. A nivel diplomático, la situación también encendió alertas, dado que no se reportaron irregularidades en la documentación ni razones técnicas para impedir la salida del vuelo.