Una patrulla compuesta por 37 militares ecuatorianos fue sorprendida mientras realizaba operaciones de reconocimiento ofensivo por parte de un grupo armado de más de 200 hombres, en la provincia de Sucumbíos, en la frontera con Colombia, lo que obligó a los uniformados a retirarse y abortar la misión. El hecho ocurrió el miércoles 4 de junio.
La institución detalló que el grupo enemigo estaba fuertemente armado con un arsenal que contaba con fusiles, lanzagranadas, ametralladoras y pistolas, por lo que los militares decidieron no iniciar un combate directo debido a la clara desventaja numérica y de armamento.
Durante el operativo, lograron detener a una persona que aseguró pertenecer al Frente Carolina Ramírez, una facción disidente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Este hecho se suma a las operaciones militares que se desarrollan en la región amazónica y en el norte del país, tras el ataque ocurrido el 9 de mayo en Alto Punino, donde murieron 11 militares ecuatorianos, presuntamente a manos de los Comandos de la Frontera, otro grupo disidente de las FARC.
Las autoridades mantienen reforzada la vigilancia en estas zonas fronterizas para controlar la presencia y actividades de estos grupos armados.