A dos semanas de las inéditas elecciones del Poder Judicial en México, figuras de la oposición han hecho un llamado público a no participar en la jornada, promoviendo un posible boicot.

En respuesta, la presidenta Claudia Sheinbaum rechazó estas acciones y calificó de infundadas las versiones que señalan intentos de sabotaje a los comicios que buscan renovar por voto popular más de 800 cargos judiciales, incluyendo ministros de la Suprema Corte, magistrados y jueces federales.

Durante su visita a Baja California Sur para presentar proyectos clave de infraestructura, Sheinbaum se pronunció sobre la postura crítica que han asumido figuras como el expresidente Vicente Fox y organizaciones vinculadas al respaldo de Xóchitl Gálvez en las elecciones de 2024.

Señaló que estos sectores buscan deslegitimar los avances democráticos impulsados por su gobierno, particularmente en torno a la próxima elección del Poder Judicial.

Por su parte, Vicente Fox ha calificado el proceso electoral como una «farsa» y un intento de instaurar un «control absoluto», argumentando que los jueces no ofrecen propuestas ni realizan campañas, y que su participación solo legitimaría un acto antidemocrático.

Esta postura confirma su rechazo a la reforma judicial impulsada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, que propuso la elección popular de jueces y magistrados, una medida que Fox considera un retroceso para la democracia.

En septiembre de 2024, tras la aprobación de la reforma en el Senado, Fox calificó la acción como una «traición a la patria» y advirtió que «todo el mundo los está observando», refiriéndose a los legisladores que respaldaron la iniciativa.