En un gesto que Moscú califica de «humanitario», el presidente ruso Vladímir Putin anunció un alto el fuego unilateral en Ucrania con motivo de la Pascua Ortodoxa, vigente desde las 18:00 horas del sábado hasta la medianoche del domingo al lunes. Putin expresó su esperanza de que Kiev se sume a la tregua, aunque ordenó a sus tropas mantenerse alertas ante posibles provocaciones.
Sin embargo, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski cuestionó la sinceridad de la medida, señalando que las sirenas antiaéreas sonaron en todo el país poco después del anuncio ruso. «Shaheds en nuestros cielos: esa es la verdadera actitud de Putin hacia la Pascua y la vida humana», declaró Zelenski, en referencia a los drones iraníes utilizados por Rusia.
Durante la madrugada del sábado, las fuerzas rusas lanzaron ocho misiles y 87 drones contra Ucrania, causando daños en cinco regiones del sur, noreste y este del país. Las unidades de defensa antiaérea ucranianas lograron derribar 33 drones y desviar otros 36, según las autoridades de Kiev.
En paralelo, Rusia y Ucrania llevaron a cabo el mayor intercambio de prisioneros desde el inicio de la invasión a gran escala en 2022. Moscú liberó a 277 ucranianos, mientras que Kiev entregó a 246 soldados rusos. Además, 31 prisioneros ucranianos heridos fueron intercambiados por 15 soldados rusos que requerían atención médica urgente.
La tregua pascual se produce en medio de advertencias del presidente estadounidense Donald Trump, quien ha amenazado con abandonar los esfuerzos de paz si no se logran avances significativos en las negociaciones en los próximos días. Putin, por su parte, ha reiterado su disposición a dialogar, pero ha acusado a Ucrania de incumplir treguas anteriores.