El país enfrenta un repunte alarmante de tos ferina, con 460 casos probables y 120 confirmados en 21 estados. La Secretaría de Salud ha emitido una alerta epidemiológica y recomienda reforzar la vigilancia para controlar la propagación de esta enfermedad, causada por la bacteria Bordetella pertussis, que se transmite fácilmente por pequeñas gotas de saliva al toser o estornudar.
Los síntomas inician de manera similar a un resfriado común, pero evolucionan a una tos violenta e incontrolable, especialmente peligrosa en bebés, quienes pueden presentar pausas en la respiración. Las autoridades sanitarias advierten que la baja cobertura de vacunación, acentuada durante la pandemia, ha contribuido al resurgimiento de esta enfermedad.
Para frenar la expansión, el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia exhorta a la población a verificar su esquema de vacunación, con especial atención en niños menores de cinco años y mujeres embarazadas. También se recomienda extremar medidas de higiene, como el lavado frecuente de manos y evitar el contacto con personas enfermas.
Con este brote en curso, México se suma a la creciente ola de casos a nivel mundial. La Organización Panamericana de la Salud ya había emitido una alerta en 2024, y países como Estados Unidos registraron más de 35,000 casos el año pasado. La prevención y la vacunación siguen siendo las mejores herramientas para evitar una crisis mayor.