Al menos 17 personas murieron este lunes y más de 80 resultaron heridas durante las protestas en Katmandú contra la corrupción y el veto a redes sociales como Facebook, Instagram y X. Las víctimas fallecieron en distintos hospitales de la capital, varios de ellos por heridas de bala.
Los disturbios comenzaron cuando miles de jóvenes manifestantes intentaron avanzar hacia el Parlamento y derribaron las barricadas policiales. Algunos lograron ingresar al recinto, lo que desató la respuesta de las fuerzas de seguridad con cañones de agua, gases lacrimógenos y fuego real.
El Gobierno desplegó al ejército y decretó un toque de queda en varias zonas de la capital, de 12:30 a 22:00 horas. Autoridades sanitarias advirtieron que el número de víctimas podría aumentar, pues decenas de heridos permanecen en estado crítico.
Las marchas fueron convocadas tras la decisión oficial de bloquear 26 plataformas de redes sociales no registradas, una medida que los manifestantes consideran un “ataque directo a la libertad de expresión”. La protesta también canaliza el descontento de jóvenes que denuncian corrupción, nepotismo y falta de oportunidades en el país.