El huracán Erin, de categoría 2, provocó inundaciones en varias zonas de Carolina del Norte y Virginia la madrugada del jueves, dejando carreteras bloqueadas y daños en viviendas costeras. Imágenes oficiales mostraron la carretera 12, que conecta las islas Outer Banks, parcialmente cubierta por agua y arena, lo que hizo intransitable algunos tramos.

Los medios locales reportaron daños en edificios de la isla Hatteras, especialmente en casas sobre pilotes cercanas a la playa. Además, marejadas peligrosas.

El Centro Nacional de Huracanes advirtió que los vientos sostenidos alcanzaban 169 km/h y pidió a los bañistas evitar ingresar al mar por riesgo de corrientes letales. Se prevé que Erin se debilite gradualmente mientras avanza hacia el norte-noreste en aguas abiertas.

La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica recordó que, aunque la temporada de huracanes comenzó de forma moderada, se espera que supere el promedio habitual. Científicos advierten que el cambio climático intensifica los ciclones tropicales al generar océanos más cálidos, lluvias más intensas y marejadas ciclónicas más destructivas.