El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, anunció el jueves la inclusión del Cártel de los Soles en la lista oficial de organizaciones terroristas con actividad en territorio ecuatoriano.

La decisión, formalizada mediante un decreto ejecutivo, instruye al Centro Nacional de Inteligencia, CNI, a indagar sus posibles nexos con bandas criminales locales y a coordinar acciones con agencias de inteligencia extranjeras.

“Las posibles relaciones del Cartel de los Soles con el entramado criminal en Ecuador” deberán ser verificadas, señala el documento oficial. La medida se enmarca en el estado de “conflicto armado interno” que rige desde inicios de 2024, y sigue la misma línea de la administración de Donald Trump en EE. UU., cuyo Departamento del Tesoro sancionó a finales de julio a esta red como grupo terrorista.

Washington sostiene que el Cártel de los Soles es dirigido por Nicolás Maduro y por altos mandos políticos y militares de su régimen.

La fiscal general estadounidense, Pam Bondi, llegó a vincular directamente al mandatario venezolano con el narcotráfico y ofreció una recompensa de $50 millones de dólares por información que permita su captura.

No es la primera vez que Noboa aplica este tipo de calificación. En enero, su gobierno declaró terrorista a la banda transnacional Tren de Aragua, nacida en una prisión de Venezuela y poco después a disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, como los Comandos de la Frontera y el Frente Óliver Sinisterra.

Todas estas estructuras pasaron a ser objetivos militares y policiales como parte de la ofensiva contra el crimen organizado que, según el Ejecutivo, busca frenar el repunte de la violencia que ha situado a Ecuador como el país con la tasa de homicidios más alta de América Latina en 2025, con un promedio de al menos un asesinato por hora.

Las tensiones diplomáticas entre Ecuador y Venezuela se agravaron en abril, tras el asalto policial a la Embajada de México en Quito para detener al exvicepresidente Jorge Glas, quien se encontraba bajo asilo. Caracas consideró la operación una violación de la soberanía diplomática y rompió relaciones con Quito.

Desde Venezuela, las acusaciones han sido desestimadas. Diosdado Cabello, ministro de Interior y considerado la segunda figura más influyente del chavismo, calificó al Cartel de los Soles como “un invento” de Washington.

El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, defendió la posición de su país: “Hay grupos narcoterroristas designados que operan en la región. Algunos utilizan el espacio aéreo internacional y las aguas internacionales para traficar veneno a Estados Unidos. Y esos grupos serán combatidos. El presidente lo ha dejado claro desde que asumió el cargo”, afirmó.

Rubio fue más allá y definió al Cartel de los Soles como “una organización que se hace pasar por un gobierno”, en alusión directa al régimen chavista: “El régimen de Maduro no es un gobierno legítimo. Nunca los hemos reconocido como tal. Son una organización criminal que ha tomado el control de un país y que amenaza a las compañías petroleras estadounidenses en Guyana”.