Un megaoperativo se realizó este fin de semana en Colorado, Estados Unidos y derivó en la detención de más de 100 migrantes indocumentados que se encontraban en un club nocturno ubicado al interior de un centro comercial y el cual funcionaba de manera ilegal, según informaron las autoridades.
La redada ejecutada por la DEA se realizó en Colorado Springs con la colaboración de más de una decena de agencias estatales, entre ellas el FBI, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), además de cientos de funcionarios.
La fiscal general Pam Bondi informó en su cuenta de X que el lugar era «frecuentado por terroristas» pertenecientes a la banda venezolana Tren de Aragua y a la pandilla MS-13, ambas declaradas como «organizaciones terroristas» por el actual gobierno estadounidense.
El presidente Trump celebró la operación en su plataforma Truth Social, afirmando que estuvo dirigida contra «algunas de las peores personas que se encuentran ilegalmente» en el país. Además, arremetió contra los jueces federales que han bloqueado algunas deportaciones, advirtiendo que sus decisiones conducen a un «caos plagado de delincuencia».
En las últimas horas, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) dio a conocer que más de 800 inmigrantes fueron detenidos en Florida durante una operación conjunta con autoridades del estado.